Querida Familia Religiosa,

Por gracia de Dios, algunos miembros del Seminario de Lipá, tuvimos la oportunidad de hacer una vista a Hong Kong durante las vacaciones de mitad de año lectivo.
La intención era conocer algo del mundo chino y visitar nuestra parroquia. Bueno, así lo hicimos y lo aprovechamos mucho.
Entre las muchas cosas que hay para destacar, podríamos señalar simplemente dos.

La visita a la isla Yim Tin Tsai. En esta isla vivió y fundó una comunidad cristiana San José Freinademetz, misionero italiano en China. Su vida es por demás misionera: luego de ser ordenado sacerdote decidió irse a las misiones, ingresó en la Sociedad del Verbo Divino y fue rápidamente enviado a la lejana China. Permaneció por dos años en Hong Kong aprendiendo el idioma y haciendo varios apostolados. Uno de estos fue el trabajo en esta isla que visitamos, al este de Hong Kong, en el distrito de Sia Kung. El santo convirtió a a todos sus habitantes y construyó una iglesia: más aún, allí mismo vivió por algún tiempo. Pudimos, entonces, ver las ruinas de su casa y de la antigua iglesia. Pero además tuvimos la gracia de tener misa en la actual capilla de la isla, que reemplaza la original.

San José Freinademetz continúo su misión en China y allí mismo murió. Fue su vida una gran obra de inculturación, pues no sólo aprendió el idioma sino que también se imbuyó totalmente en la cultura china. Dice una biografía suya: “Toda su vida estuvo marcada por el esfuerzo de hacerse chino entre los chinos, al punto de escribir a sus familiares: «Yo amo la China y a los chinos; en medio ellos quiero morir, y entre ellos ser sepultado»” . Fue él mismo quien dijo: “No considero la vida misionera como un sacrificio que ofrezco a Dios, sino como la mayor gracia que Dios habría podido darme” .

Fue ciertamente una gran gracia el haber podido visitar los mismos lugares por donde pasó y vivió tan gran santo. A él, que es el patrono de nuestro noviciado de Lipa, nos encomendamos y le pedimos por más vocaciones.

Nuestra parroquia “Santos Pedro y Pablo”, de Yeung Long. Sí, tuvimos el enorme privilegio de visitar la parroquia en la que el Instituto trabaja en Yueng Long (al noroeste de la isla de Hong Kong).

El Instituto llegó en el año 2002 y desde ese entonces ha ido recolectando abundantes frutos, por gracia de Dios. Actualmente se encuentra allí trabajando los padres Gervais Baudry, Juan Beroch y Carlos Almontes.

Hay que estar ciertamente allí para darse cuenta de todo el bien que se está haciendo. Tuvimos la oportunidad de estar con los monaguillos, siempre tan numerosos, con grupos de la tercera orden y con amigos y conocidos de la parroquia.

Pero lo que más queremos destacar es la celebración de la Misa. La Misa debe ser el corazón de la parroquia: y así ciertamente lo es en Hong Kong. Los domingos tienen 5 misas, que se alternan entre cantonés e inglés. En cada una de estas misas la iglesia se llena completamente y la liturgia se vive intensamente. Era realmente impresionante ver la cantidad de monaguillos tan bien organizados, los diferentes coros y grupos de lectores, ministros y colectores. Terminaba una misa y una inmensa avenida de gente dejaba el templo para dar lugar a otra, que enseguida tomaba sus lugares y sus respectivos oficios: ¡hasta hay grupos de ostiarios! Es asombroso ver con cuánto amor y responsabilidad se vive la liturgia.
Es muy de subrayar también el trabajo que lleva a cabo la parroquia con personas necesitadas. Se da asistencia espiritual y material a muchos desocupados y con problemas de documentación. De hecho, la parroquia tiene un pequeño “refugio” para mujeres que sobrellevan estos problemas. Se les da comida y un lugar donde estar. La parroquia es para muchos de ellos un oasis… porque al vivir en un mundo que no da lugar al que sufre, encuentran en la parroquia una familia, una casa donde siempre serán bien recibidos; en ella encuentran ciertamente a “Cristo vecino”.

Agradecemos, entonces haber podido estar allí y haber tenido la posibilidad de ser testigos del trabajo de nuestros misioneros: son ellos los que nos vivifican y alientan a continuar en nuestro itinerario de formación.

Compartimos también algunas fotos de la visita a Macao.